Arrugas en la frente

Las arrugas, junto a la flacidez, son el signo más evidente del envejecimiento a nivel facial y corporal. 

Las arrugas en la frente se reconocen por ser pliegues que se forman en la piel a causa de la acción diaria de gesticular los músculos y como consecuencia de la pérdida de colágeno a nivel interno que, con el paso del tiempo, se refleja en la epidermis; la capa más externa de la piel.  

El colágeno, por su parte, es una proteína estructural y fibrosa que se encuentra de forma natural y abundante en nuestro cuerpo, y que actúa como sostén de los órganos con capacidad de expansión y contracción.

El colágeno se halla, sobre todo, en mayor proporción en nuestra piel, siendo el principal soporte de sus fibras, aportándole resistencia, firmeza y elasticidad.

Con el paso del tiempo, se estima que, a partir de los 25 años, nuestro cuerpo poco a poco reduce la síntesis de colágeno, por lo que su estructura se ve alterada y la elasticidad y la firmeza empiezan a desvanecer, dando paso a las arrugas. 

Por otro lado, las arrugas en la frente se caracterizan por ser líneas de expresión que también aparecen de forma prematura en aquellos tipos de piel más seca y fina en las que se hacen aún más visibles en el tercio superior de la cara. 

Actualmente, la medicina estética dispone de diferentes tratamientos de lo más efectivos para eliminar estas arrugas en la frente, siendo las infiltraciones de neuromodeladores y ácido hialurónico, y el láser las técnicas más utilizadas. 

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Tratamientos más eficaces para eliminar las arrugas en la frente 

La infiltración de neuromodeladores es, actualmente, la técnica más demandada y utilizada por la gran efectividad y capacidad que presenta a la hora de ofrecer unos resultados tempranos, naturales y seguros, siempre y cuando la inyección la realicen los médicos especialistas acreditados y experimentados.

Los neuromodeladores es y continúa siendo, por tanto, el tratamiento de medicina estética más demandado para eliminar las visibles arrugas en la frente e imperfecciones que se forman en el área que envuelve la mirada.

El uso de neuromodeladores en la frente destaca por ser su efecto beneficioso, al ser una proteína que sirve para relajar el músculo de manera temporal y eliminar las arrugas  que se forman sobre todo en el entrecejo, la frente y las patas de gallo. En casos en los que las arrugas en la frente están más asentadas o marcadas como consecuencia de la fuerza del músculo, se combina la infiltración de neuromodeladores con ácido hialurónico; una sustancia que permite rellenar esas arrugas pronunciadas. 

Por otro lado, el láser CO2 Resurfacing es una técnica también muy útil en el tratamiento de las arrugas faciales al permitir una renovación celular y al activar la producción de colágeno. 

 

Beneficios de los neuromodeladores en la frente para la eliminación de arrugas faciales 

Los neuromodeladores se utilizan para eliminar temporalmente y prevenir la aparición de las arrugas en la frente, así como las líneas de expresión.

Los neuromodeladores en la frente se utilizan, sobre todo, para rejuvenecer la zona facial superior, el entrecejo y las patas de gallo. De esta forma, el tratamiento se lleva a cabo infiltrando pequeñas cantidades de producto en diferentes puntos de la frente para paralizar el músculo, impidiendo así que se contraiga y que dé lugar a la aparición de arrugas

Es importante saber que el efecto de los neuromodeladores en la frente es temporal, y presenta una duración de cuatro a seis meses, dependiendo de la piel de cada paciente.

Respecto a la edad idónea para empezar a ponerse neuromodeladores en la frente, los especialistas recomiendan iniciar el tratamiento, y siempre según el caso, entre los 25 y 35 años ya que los neuromodeladores no sólo eliminan, también previenen la aparición de las arrugas en la frente

En estos casos, se aplican pequeñas dosis de neuromodeladores, técnica apta para edades más jóvenes. Es decir, para aquellas personas que desean resultados muy sutiles. 

El tratamiento se realiza con menos dosis que las utilizadas para las infiltraciones habituales de neuromodeladores en la frente, y el resultado es un rostro uniforme, exento de arrugas, manteniendo el principal objetivo de prevenir su aparición futura y de no alterar bajo ningún concepto la naturalidad de la cara

El tratamiento, tal y cómo indica su nombre, está recomendado, por tanto, para los rostros más jóvenes que no presentan marcadas arrugas en la frente y en otras áreas del tercio superior, pero cuya anatomía muscular comienza a contraer de forma muy temprana áreas como las patas de gallo y el entrecejo, dónde finalmente se forman y se marcan las arrugas. 

Así, este tratamiento nos permite, por un lado, prevenir la aparición de estas arrugas en la frente de forma muy precoz, al paralizar de forma temporal el músculo y, por otro, nos ayuda a ganarles tiempo a los signos más antiestéticos del envejecimiento prematuro.

 

Efectos de la aplicación de ácido hialurónico en la frente 

El ácido hialurónico es una sustancia que se encuentra de forma natural en numerosos tejidos y órganos del cuerpo humano y destaca por su gran capacidad para atraer y retener el agua, lo que favorece una mejor hidratación de los tejidos. 

Con el paso del tiempo, la presencia del ácido hialurónico en la piel va disminuyendo, por lo que, en medicina estética, constituye uno de los tratamientos faciales más eficaces y recurrentes para proporcionar volumen a la piel y recuperar así la elasticidad y firmeza perdida, pudiendo, al mismo tiempo, rellenar y minimizar las arrugas en la frente que pueden originarse de forma pronunciada.  

Para eliminar las arrugas en la frente, los especialistas hacen uso del ácido hialurónico reticulado, que es el que se utiliza como sustancia de relleno debido a su gran capacidad de retención del agua. Este tipo de ácido hialurónico destaca por ser más denso, ya que sus moléculas están entrelazadas para poder otorgar una mayor solidez y consistencia y así permitir un resultado más perdurable en el tiempo. 

Los resultados del tratamiento de ácido hialurónico para eliminar las arrugas en la frente son inmediatos y su duración dependerá de cada tipo de piel. No obstante, los efectos suelen extenderse a los 9-12 meses. Además, es un tratamiento biocompatible y reabsorbible y permite, a las personas que se lo realizan, recuperar su rutina inmediatamente después de realizarse el tratamiento.