Tratamiento para varices, ¿cómo mejorar su apariencia estética?
Las varices en las piernas pueden ser un problema complejo o un trastorno estético. En cualquier caso, si padeces de varices, debes saber que eliminar varices sin cirugía es posible gracias a las técnicas y los tratamientos para varices de vanguardia. Unos tratamientos que, además, son prácticamente indoloros y no precisan ni de anestesia, ni de baja laboral.
Generalmente, las varices suelen aparecer de forma progresiva a partir de la mediana edad, aunque hay gente con mucha predisposición que las puede presentar desde etapas tempranas de su juventud. Independientemente de la edad del paciente, las varices surgen como resultado a una incompetencia valvular, o a un fallo del mecanismo valvular que presentan las venas, impidiendo que se produzca el retorno del flujo sanguíneo en las mismas.
De esta forma, debido al fallo de las válvulas, las venas comienzan a presentar un reflujo anómalo de sangre que condiciona un aumento de la presión sanguínea en el territorio venoso de la pierna, ocasionando, como consecuencia, su dilatación progresiva.
En cuanto a su aspecto, las varices pueden resultar muy antiestéticas al presentar un tono morado o azulado y tienden a localizarse, en la mayoría de los casos, en la zona de las piernas.
Si padeces de varices debes tener en cuenta que, si no las tratas de forma precoz, la evolución natural de la enfermedad venosa crónica avanzará, pudiendo surgir complicaciones en estadios avanzados como son: las varicoflebitis (inflamación y trombosis dolorosa de la variz) y algunos cambios inflamatorios en la piel que, en las fases finales de la enfermedad, pueden acabar en la aparición de úlceras.
Se calcula que hasta 4 de cada 10 mujeres padecen varices con riesgo tanto funcional como estético, llegando a condicionar incluso su calidad de vida y a ocasionarles inseguridad debido a la apariencia antiestética que presentan.
Actualmente, existen diferentes procedimientos médico-estéticos que permiten eliminar varices sin cirugía, evitando recurrir así a postoperatorios tediosos. En cualquier caso, lo más importante es que, ante el primer síntoma, acudas a la consulta de un médico especialista en el tratamiento para varices con el objetivo de que pueda estudiar tu caso y determinar la pauta más adecuada.
¿Por qué aparecen las varices?
Como veníamos diciendo, las varices surgen como resultado de un mal retorno venoso en el organismo. Es decir, la sangre no circula correctamente, con lo que los vasos sanguíneos se dilatan provocando, como consecuencia, la fractura de los capilares que dan lugar a las varices o arañas vasculares.
Existen determinados factores que favorecen a la aparición de las varices, pudiendo diferenciar:
- Genética
- Alteraciones hormonales
- Exceso de peso
- Sedentarismo
- Edad
Si estás preocupado por las varices o tienes síntomas como dolor, hinchazón o pesadez en las piernas, es recomendable que acudas a un médico especialista en medicina vascular para que pueda estudiar tu caso y determinar el tratamiento para varices más adecuado según tus necesidades.
Cómo eliminar las varices
Como sabrás, los encargados en la eliminación y tratamiento para varices son los especialistas en flebología o cirujanos vasculares. De esta forma, ante la aparición del primer síntoma de variz, es muy importante que acudas a uno de estos especialistas para que te pueda realizar un diagnóstico preciso con la ayuda de una ecografía Doppler, obteniendo así una visibilidad completa de tu mapa venoso que ayudará a identificar la magnitud del problema.
En cuanto al mejor tratamiento para varices, es importante que sepas que hoy en día es posible eliminarlas gracias a la aplicación de técnicas que no requieren cirugía como son la escleroterapia, el láser o los cianocrilatos.
Tratamiento para varices más eficaces
Como decíamos, existen numerosos tratamientos para varices; desde los tratamientos para varices sintomáticos; una técnica que mejora su apariencia estética y amaina los síntomas pero que no elimina del todo la variz, hasta el tratamiento para varices que actúa directamente sobre el origen logrando eliminarla de forma permanente.
Tratamiento para varices sintomático
Por norma general, el tratamiento para varices sintomático que mayor eficacia ha demostrado en numerosos estudios es la compresión de la extremidad mediante una media de compresión elástica. Otros tratamientos sintomáticos, en cambio, como ocurre con la medicación flebotónica, tienen una eficacia muy discutible y, en la mayoría de los estudios, no han demostrado ser más eficaces que las medias elásticas.
Hoy en día, más del 90% de las varices se pueden eliminar mediante técnicas no invasivas o mínimamente invasivas, evitando así la necesidad de pasar por quirófano.
Hoy en día, en nuestra clínica IMR, disponemos de un amplio grupo de técnicas ablativas que logran el sellado de las varices. Esto lo conseguimos aplicando un tratamiento para varices desde el interior de la vena. Una técnica que se administra mediante pequeñas punciones a través de la piel.
Sellado de varices mediante ablación térmica o no térmica
En este grupo de técnicas vanguardistas de tratamiento para varices nos encontramos las técnicas por ablación térmica o no térmica. Las técnicas térmicas, por su parte, consiguen el sellado de las venas y su posterior desaparición administrando una energía en forma de calor que produce a la vena un daño irreversible. El láser endovenoso y la ablación de varices por radiofrecuencia son los ejemplos de este tipo de tratamiento para varices.
En segundo lugar, también podemos conseguir el sellado de las varices realizando un daño químico a las venas. Entre estas técnicas nos encontramos a la escleroterapia; tratamiento para varices con microespuma de varices, la ablación; una farmacomecánica que combina escleroterapia y daño mecánico a la vena (Sistemas Flebogrif o Clarivein) y la aplicación de cianoacrilatos.
Tratamiento para varices mediante escleroterapia
La escleroterapia es actualmente el tratamiento más utilizado para eliminar las arañas vasculares. Por su parte, esta técnica consiste en la inyección de un medicamento en las venas enfermas que actúa sellándolas con el objetivo de que el cuerpo las reabsorba.
La esclerosis de varices se realiza en varias sesiones. Un número que variará en función de la valoración inicial del especialista y la respuesta que ofrezca el paciente al tratamiento. En cualquier caso, es importante saber que desde la primera ya pueden apreciarse cambios significativos de forma gradual.
En nuestro caso, en IMR solemos combinar el tratamiento de escleroterapia con la aplicación de un láser vascular en la misma sesión, potenciando así los resultados. Tras cada sesión, se recomienda utilizar medias de compresión según las indicaciones del profesional.
Ventajas de la escleroterapia como un tratamiento para varices
- Mejora la estética de las piernas. En pocas sesiones se consiguen unas piernas libres de imperfecciones.
- Es un tratamiento ambulatorio. Se realiza en consulta y sin anestesia, sin ningún dolor para el paciente.
- Es altamente seguro y sin efectos secundarios. La microespuma utilizada en la escleroterapia es 100% compatible con nuestro organismo.
- Su realización es rápida. La duración de la escleroterapia es variable dependiendo del número de lesiones, pero suele durar alrededor de 20 minutos.
- Previene el desarrollo de enfermedades vasculares.
Tratamiento para varices mediante la aplicación de cianocrilatos
Los cianoacrilatos comprenden uno de los tratamientos para varices más novedosos actualmente. Una técnica mediante la cual se administra un líquido (polímero biocampatible) en el interior de la vena para sellar la variz.
Esta técnica vanguardista reporta numerosos beneficios para el paciente, ya que se realiza sin necesidad de anestesia, de forma totalmente ambulatoria, no precisa de uso de medias elásticas de compresión post-tratamiento y la probabilidad de pigmentación cutánea es muy baja.
Hasta ahora, el tratamiento para varices se restringía prácticamente a los meses de octubre a mayo ya que, en el resto de meses, el fármaco utilizado para su reparación podía pigmentar la piel. Actualmente, gracias a la mejora de las técnicas, también podemos utilizar el cianocrilato; un producto que ofrece grandes ventajas tanto para la comodidad del paciente como para los resultados del tratamiento para varices, durante los meses de verano.
Esta nueva técnica se basa en introducir en el interior de la vena un polímero biocompatible, el cianocrilato, que provoca la oclusión de la vena sin necesidad de su extracción, es decir, sin cirugía. Mediante ecografía, el especialista en varices guía el tratamiento a través de la vena y deposita el polímero en el lugar indicado consiguiendo así sellar las paredes de la vena, de forma que quedan pegadas y hace que no sea necesario el uso de medias de compresión.
Por su parte, el cianocrilato para eliminar las varices en verano puede utilizarse incluso en las venas más complejas que, hasta hace poco tiempo, solamente eran candidatas a la cirugía de varices.
Ventajas del tratamiento para varices con cianocrilato
Como acabamos de comentar, son muchos los beneficios que conlleva aplicar cianocrilato como un tratamiento para varices. A continuación, desde IMR entramos en detalle en algunas de las ventajas más destacadas:
- El resultado es inmediato en la primera sesión.
- Consigue resultados altamente estéticos incluso en venas de gran tamaño.
- Compatible con la exposición solar. Este tratamiento puede realizarse durante todo el año por no existir el riesgo de pigmentación de la piel.
- No requiere medias de compresión. El cianocrilato sella las paredes de la vena de forma inmediata, por lo que no son necesarias medias compresivas para su retención.
- Reduce los dolores y molestias en las piernas. En una sola sesión, el cianocrilato repara las venas dañadas favoreciendo el retorno venoso.
- Es un tratamiento ambulatorio. Se realiza en consulta, sin cirugía y sin ningún dolor para el paciente.
En cualquier caso, es importante destacar que los problemas de varices se curan, pero ningún paciente está exento a poder volver a desarrollarlas con el tiempo. Por ello, desde IMR aconsejamos acudir a una revisión una vez al año con tu cirujano vascular con el objetivo de llevar un seguimiento constante y poder actuar a tiempo en caso de que sea necesario.