Vitaminas o toxina botulínica: depende de la necesidad de cada piel
Vitaminas para cuidar la línea, fortalecer uñas y cabello, y que además refuerzan las defensas. Sus propiedades todavía van más allá y también ayudan a revitalizar la piel. No todo el mundo lo sabe, y eso que son uno de los pilares de la dermatología estética.
Una especialidad en constante evolución que sin embargo para muchos está anclada en los tratamientos de toxina botulínica y ácido hialurónico. Son técnicas pioneras en la lucha contra el envejecimiento, pero no siempre responden a las necesidades de todas las pieles.
La toxina botulínica está indicada para tratar las arrugas de expresión visibles en la frente y que aparecen al fruncir el entrecejo. Su aliado suele ser el ácido hialurónico, polisacárido de gran capacidad para reconstruir las fibras que forman parte del tejido dérmico y que otorga volumen.
Pero, si lo que pide a gritos la piel es mejorar su apariencia con un extra de luminosidad, el resultado viene de la mano de una mesoterapia combinada con vitaminas y ácido hialurónico.
Tratamiento facial con vitaminas
La textura de la piel comienza a sufrir cambios a partir de los 21 años. No es sinónimo de envejecimiento pero si que es necesario prevenir sus primeros signos para salvaguardar la calidad facial.
Las vitaminas en la piel estimulan y mantienen el metabolismo celular. Un coktail que hidrata desde el interior gracias a la combinación de sustancias que incluye el dermatólogo-facialista según las necesidades de cada paciente.
Desglosamos el protocolo más habitual de mesoterapia facial:
Vitamina A (Retinol)
Antioxidante que favorece la eliminación del pigmento. Mejora la textura de la superficie cutánea y elimina células muertas.
Vitamina B
EL complejo de vitaminas del grupo B favorece principalmente la hidratación de la piel. También estimula el crecimiento y la reproducción celular.
Vitamina C
Facilita la absorción de otras vitaminas y minerales y favorece la formación de colágeno.
Vitamina D
Regula el metabolismo de calcio y fósforo y cumple funciones de antienvejecimiento celular.
Vitamina E
El antioxidante más potente.
Existe gran variedad de fórmulas que al introducirlas en la piel consiguen un efecto resplandeciente apto para todo tipo de cutis y mayores de 25 años.