¿Cómo eliminar las verrugas en la piel de manera segura y efectiva?
Las verrugas en la piel son un tipo de lesiones benignas en la dermis de origen infeccioso causadas, generalmente, por el virus del papiloma humano. A diferencia de los lunares, manchas u otro tipo de alteraciones cutáneas, las verrugas en la piel presentan una morfología y color variable, son más visibles que los lunares y afectan a diferentes capas de la dermis, pudiendo llegar a alterar las más profundas.
Por su parte, las verrugas en la piel se localizan en diferentes áreas del cuerpo siendo las manos, los pies, las axilas, la cara y los genitales las zonas más comunes.
Lo cierto es que, en muchos casos, las verrugas en la piel pueden desaparecer de forma espontánea. No obstante, ante su aparición, es conveniente tratarlas de forma temprana con un dermatólogo especialista para evitar su extensión o contagio a otras personas.
En definitiva, las verrugas en la piel comprenden un tipo de alteración, a priori, indolora y su tratamiento de forma temprana las consigue eliminar en pocas semanas.
¿Dónde suelen aparecer las verrugas en la piel?
Las verrugas en la piel son muy comunes en niños, no obstante, también afectan a adolescentes y adultos. De hecho, estas pueden localizarse en cualquier parte de la piel, aunque, en la mayoría de los casos, suelen aparecer principalmente en el área de las manos, plantas de los pies; que es una zona en la que pueden llegar a ser muy molestas dado a que se hallan en un punto de apoyo, y en los genitales.
Es importante saber que las verrugas en la piel que aparecen la zona íntima son consecuencia directa del contacto con el virus del papiloma humano a través de las relaciones sexuales y es una alteración, por tanto, que suelen padecer las personas adultas.
Existe evidencia científica de que un alto porcentaje de personas a lo largo de su vida estará en contacto con el virus. Es por ello que la detección y tratamiento temprano de estas verrugas las resolverá de forma eficaz y limitará el contagio a otras personas.
Verrugas en la cabeza
La aparición de verrugas en la cabeza es más habitual de lo que imaginamos y son lesiones cuya aparición también es vírica, provocada por el virus del papiloma humano (VPH).
Las verrugas en la cabeza suelen ser benignas. Sin embargo, es importante que un dermatólogo, especialista en el cuidado de la piel, determine su naturaleza tras una valoración personalizada para poder pautar así el tratamiento para las verrugas más adecuado.
En cuanto a su aspecto, las verrugas en la cabeza suelen ser redondeadas y de color rosáceo o blanquecino y, por lo general, son alteraciones que pueden generar molestias y, sobre todo, incomodidad. Para evitar este posible malestar, los dermatólogos recomiendan tratarlas de forma temprana y adecuada, pudiendo así eliminarlas lo antes posible.
La técnica más empleada para eliminar verrugas es la crioterapia o fármacos, así como la aplicación de pomadas específicas. En los casos en los que las verrugas en la cabeza sean muy grandes, estas se pueden extirpar con tecnología láser o incluso cirugía. También existen casos en los que las verrugas en la cabeza desaparecen de forma espontánea.
Es importante saber que las personas que padecen verrugas en la cabeza deben tener especial precaución a la hora de compartir objetos de higiene personal, como cepillos del pelo o toallas, ya que estas se pueden contagiar rápidamente por el contacto directo con una persona que las presenta en esta zona.
Verrugas en la espalda
Por otro lado, las verrugas en la espalda, al igual que ocurre en las verrugas en la cabeza u otra área corporal o facial, surgen como consecuencia de contagio directo del virus del papiloma humano (VPH) en las células de la piel.
Como hemos comentado antes, este tipo de verrugas en la piel se transmiten con gran facilidad y rapidez si no se adoptan las medidas de precaución necesarias. Por este motivo, ante su aparición, se debe consultar con el dermatólogo especialista para que verifique si realmente se trata de una verruga en la espalda y, en caso afirmativo, que pueda pautar el tratamiento o técnica para eliminar verrugas más adecuada.
El método más habitual empleado para eliminar verrugas en la espalda es la aplicación de ácido salicílico o el tratamiento con cantadirina; una sustancia química con alta capacidad y precisión para eliminar las verrugas sin generar cicatrices.
Por otro lado, también puede utilizarse nitrógeno líquido para congelar la verruga (crioterapia). Existen casos de verrugas en la espalda en los que se puede aplicar de forma tópica ácido salicílico o hacer uso de tecnología láser.
Verrugas en las axilas
En tercer lugar, las verrugas en las axilas responden médicamente a fibromas blandos o acrocordones. Estas verrugas en la piel se caracterizan por ser un tipo de lesión con relieve, de color pardo o carne, blanda y, en la mayoría de los casos, suelen hallarse en los pliegues.
Las verrugas en las axilas suelen manifestarse a partir de los 25-30 años, y pueden ir en aumento si existe predisposición genética o directamente por edad.
Generalmente, las verrugas en las axilas no provocan síntomas, pero sí que pueden llegar a ser molestas ya que, al localizarse en los pliegues, corren el riesgo de inflamarse.
En cuanto a la aparición de las verrugas en las axilas, está demostrado que pueden influir factores como la herencia genética, los trastornos hormonales, el sobrepeso o incluso la diabetes mal controlada.
Ante la sospecha de presentar verrugas en las axilas, es recomendable acudir al dermatólogo; el especialista que debe realizar el diagnóstico, ya que las verrugas en la piel a veces pueden confundirse con otro tipo de lesiones cutáneas como los nevus dérmicos.
Respecto al tratamiento de las verrugas en las axilas, al igual que ocurre con el resto de las verrugas en la piel, puede realizarse con crioterapia, láser o productos tópicos, según cada caso concreto.
Verrugas en la cara
Por último, las verrugas en la cara pueden ser, a priori, las más antiestéticas y, en la mayoría de los casos, tienden a ser verrugas vulgares. Es decir, se manifiestan de forma aislada y responden a una forma redondeada y a un tacto rugoso.
En cuanto a otro tipo de verrugas en la cara, también pueden localizarse verrugas no víricas como los puntos rubí y las queratosis seborreicas como consecuencia de la edad y la exposición continuada al sol.
Tratamiento para las verrugas
Tal y como hemos comentado anteriormente, las verrugas en la piel son un tipo de alteración muy contagiosa que se transmiten por contacto directo tanto con la piel como por objetos.
Ante el primer síntoma o manifestación de verrugas en la piel, es muy importante solicitar cita con el dermatólogo para que realice un diagnóstico adecuado. Hecha la valoración, el especialista pautará el tratamiento para las verrugas más efectivo según el tipo, tamaño o localización.
El método de tratamiento de verrugas víricas más común es la crioterapia (congelación de la lesión) y tratamiento tópico, mientras que la técnica más utilizada para eliminar verrugas no víricas es el láser.
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